Matiz de la vida: Sombras

Llámame al sepulcro de la historia

Siente las llagas de mis memorias

Olvida las razones de mis pasadas glorias

Ama la batalla sin victoria

Porque la vida no sangra

La soledad no añora

En vano las lágrimas no se derraman

El tiempo no perdona

Fielmente por un mundo sin motivo

Caemos

Vivimos

Sentimos

Merecemos morir

Amamos

Caminamos

En un vicio sin fin

Con la lluvia del firmamento

Que cual lágrimas cae

Encadenamos momentos

Extinguimos la luz que en nuestros ojos ha de brillar

Lejos de nuestra mente

Apartados de nuestra vida

Dominados por un sueño creciente

Por una voluntad rendida

Sublime

Ante la sombra de un oscuro sepulcro
Mirando las alas del ángel rendido
Silenciado por la luz de mi mundo
Perdido en mi propio camino

Perdido
Ante un mundo
Ante un anhelo
Ante la vida
Ante el deseo

En mi razón
Difusa en la locura
Invadido por mi temor
Naciendo de lo incierto
Por mi pasión
Creando bellos momentos

Sintiendo el frió
Sintiendo el calor
De mis confesiones
De mi amor
En esta vida
En esta guerra
De las almas perdidas
De las almas en pena

Demasiado débil para rendirme
Demasiado fuerte para perder
Demasiado vano para destruirme
Demasiado alto para caer

Por mi eterno luto divino
Por mi eterna vida varada
Por el dolor mi fiel amigo
Por una vida plasmada en palabras

Puesto que no se vivirá en un mundo sin muerte
No se amara en una vida sin dolor
No se iluminara un mundo sin penumbra
No sangrara el arte por un mundo sin pasión